Lo que la Biblia enseña sobre… La segunda Venida de Jesús

Jesús Promete Volver

1. ¿Qué maravillosa promesa hizo Jesús?

“No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí.
En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy pues, a preparar lugar para vosotros.
Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis” (Juan 14: 1 - 3)

2. ¿Cómo debemos considerar esta promesa?

“…Aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de nuestro Gran Dios y Salvador Jesucristo” (Tito 2: 13)

¿Cómo Vendrá Jesús?

3. ¿En qué forma regresara Jesús?

“Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran gloria” (Mateo 24: 30)

4. ¿Cuántos verán su glorioso advenimiento?

“He aquí que viene con las nubes, y todo ojo le verá y los que le traspasaron; y todos los linajes de la tierra harán lamentación por El. Sí, Amén” (Apocalipsis 1: 7)
¿Para qué Vendrá Jesús?

5. ¿Cuál es el objetivo de la venida de Jesús?

“Y el Hijo del Hombre vendrá en la gloria de su Padre con sus ángeles, y entonces pagará a cada uno conforme a sus obras” (Mateo 16: 27)

6. ¿Qué sucederá con los muertos justos?

“Tampoco queremos, hermanos, que ignoréis acerca de los que duermen, para que no os entristezcáis como los otros que no tienen esperanza.
Porque si creemos que Jesús murió y resucitó, así también traerá Dios con Jesús a los que durmieron en El.
Por lo cual os decimos esto en palabras del señor: que nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron.
Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de Arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero” (1 Tesalonicenses 4: 13 - 16)

7. ¿Qué ocurrirá con todos los justos?

“Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor” (1 Tesalonicenses 4: 17)

“¡Maranhata!” Una palabra usada a modo de saludo por los primeros cristianos y que significa “El Señor Viene”

La Segunda Venida de Jesús es una promesa esperada por todas las Iglesias que profesan ser cristianas.
Como dije al comienzo de estos temas, esta promesa ya no es tomada con importancia y ha quedado rezagada como un simple mito o historia porque no es algo tangible o, aparentemente ya ha “demorado demasiado”. Insisto, recuerden:

“El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento” (2 Pedro 3: 9)
Esta enseñanza está basada en la promesa de Jesús, dada principalmente en Juan 14, aunque también se había dado en otros libros del antiguo testamento. Se refiere a un regreso completamente Físico de Jesús y también… la parte que muchos consideran desagradable, un juicio.

A nadie le gusta ser juzgado, y quizás esa es la principal razón por la que muchos prefieren ignorar esta enseñanza.

Es tan fácil evitar un veredicto en tu contra, lo único que tienes que hacer es seguir ciertas leyes, en este caso las leyes Bíblicas o 10 Mandamientos.

También es sabido, que no solo se peca con acciones, sino también con el pensamiento, el solo hecho de pensar en hacer algo que está mal, aun si no llegas a hacerlo, ya es consentir al pecado en tu vida.

“Y tu Salomón, hijo mío, reconoce al Dios de tu padre, y sírvele con corazón perfecto y con ánimo voluntario; porque Jehová escudriña los corazones de todos, y entiende todo intento de los pensamientos” (1 Crónicas 28: 9)

Ahora hablando sobre la resurrección de los muertos. No sé si esto también es algo que se enseña en todas las denominaciones, se que en la Católica sí, ya que ellos mismo en su creo dicen “…Desde allí ha de venir a juzgar a los vivos y a los muertos”

Para nosotros, la resurrección es nuestra mayor esperanza, debe ser por eso que nosotros no sufrimos “demasiado” cuando alguien muere. Nos da pena, porque somos seres con sentimientos, pero más allá de eso, tenemos la esperanza de que si una persona muere con fe, arrepentido y aceptando a Dios como su Salvador, podremos reencontrarnos con él cuando Cristo vuelva.

Lo que la Biblia enseña sobre… El Perdón de los Pecados

El Único Camino de Salvación

1.       ¿Gracias a quién y a que somos salvos?

“…quien llevó El mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia; y por cuya herida fuisteis sanados” (2 Pedro 2: 24)

2.       ¿Cuánto cuesta la salvación?

“…siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es Cristo Jesús” (Romanos 3: 24)

Obteniendo el Perdón

3.       ¿Qué reconocimiento sincero debe experimentar el pecador?

“Dos hombres subieron al templo a orar: uno era fariseo y el otro publicado.

El fariseo, puesto en pie, oraba consigo mismo de esta manera: dios, te doy gracias porque no soy como los otros hombres, ladrones, injustos, adúlteros, ni aun como este publicano;

Ayuno dos veces a la semana, doy diezmos de todo lo que gano.

Mas el publicano, estando lejos, no quería ni aun alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: Dios, se propicio a mí, pecador.

Os digo que este descendió a su casa justificado antes que el otro; porque cualquiera que se enaltece, será humillado; y el que se humilla será enaltecido” (Lucas 18: 10 - 14)

4.       ¿Qué sentimiento profundo es indispensable?

“Al oír esto, se compungieron de corazón, y dijeron a Pedro y a los otros apóstoles: Varones hermanos ¿Qué haremos?

Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo” (Hechos 2: 37 - 38)

5.       ¿Qué se debe hacer con los pecados?

“Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad. Dije: Confesaré mis transgresiones a Jehová; y tu perdonaste la maldad de mi pecado” (Salmos 32: 5)

La Dulce Seguridad del Perdón

6.       ¿Qué maravillosa transacción ofrece Dios?

“Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta: si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana” (Isaías 1: 18)

7.       ¿Cuán completo es el perdón divino?

“Yo, yo soy el que borro tus rebeliones por amor de mí mismo, y no me acordaré de tus pecados” (Isaías 43: 25)

El perdón viene de la mano con la salvación, no hay salvación sin perdón. Es algo que solo puede ser otorgado por Dios.

Hay tres pasos fundamentales que tienen que ver con el perdón:

1)      Arrepentimiento sincero es lo primero que hay q sentir, reconocer que hemos cometido una falta.

“Porque la tristeza que es según Dios, produce arrepentimiento para salvación, de que no hay que arrepentirse; pero la tristeza del mundo produce muerte” (2 Corintios 7: 10)

Esta tristeza de la que habla Pablo, no es algo superficial, es algo más fuerte y profundo, algo que nosotros solemos llamar cargo de conciencia, por eso nos sentimos tristes, porque sabemos que hemos hecho mal, pero al mismo tiempo no podemos luchar solos contra nuestra naturaleza o nuestros propios deseos.

2)      La segunda parte, llamada Justificación. que para las personas es algo difícil de creer/ entender, porque es algo “no humano”, los seres humanos tienen la tendencia de decir “te perdono, pero no olvido”

El perdón de Dios va mucho más allá del perdón del pecado. Dios no solo perdona sino que justifica, esto significa que el hombre está realmente sin culpa, es un acto de Dios por el que los hombres son declarados justos y rectos.

“Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo a una pecadores, Cristo murió por nosotros.

Pues mucho mas, ya estando justificados por su sangre, por El seremos salvados de la ira.” (Romanos 5: 8 - 9)

3)      Y el último pero no menos importante, es la santificación. Cuando hablamos de santificación, muchos recuerdan a personas sumamente consagradas a la religión, personas que no salen, no se divierten y solo se la pasan orando, verdad?

Pues les diré que esa es una idea bastante equivocada hasta cierto punto.

La palabra Santo significa “apartado/ consagrado/ dedicado” y se puede referir a algo o alguien, en este sentido, para algo especial.

Es como cuando has sido seleccionado para pertenecer a un coro, tienes ciertas reglas que seguir para cuidar tu voz: no tomar cosas heladas antes de una presentación porque sabes que puedes enfermar, cuidar tu garganta, y practicar…la práctica es importante en todo aspecto de la vida, porque tiene que ser menos con la religión?

La santificación consiste en el simple hecho de que, si ya fuiste perdonado, sigas andando con Dios a tu lado para que te ayude a superar las pruebas, la ayuda se pide, y para pedirla tienes que orar, además de tener la firme convicción de no volver a ceder al pecado o hacer cosas que sabemos están mal.

“Y a aquel que es poderoso para guardaros sin caída, y presentaros sin mancha delante de su gloria con gran alegría” (Judas 24)

Ahora, tampoco hay que pensar que porque Dios nos perdonó una vez, ya debemos considerarnos “Salvos siempre salvos” como enseñan las iglesias evangélicas, eso es muy peligroso. El camino a la santificación y la salvación es largo, en la vida siempre habrá tropiezos y tentaciones, por eso es que no solo debemos acercarnos a Dios en el momento en el que deseamos ser perdonados, sino andar con Él durante el resto de nuestras vidas, pidiendo que nos de la fortaleza necesaria para no ceder.